Nosotros desarrollamos la masa muscular por una razón muy buena, ya que nos permite movilizarnos, hacer las cosas que queremos y mantener las posturas que necesitamos. El músculo constituye alrededor del 45% de nuestro peso corporal, lo que indica su importancia. Nuestra masa muscular se desarrolla rápidamente en nuestra adolescencia y continúa aumentando en la juventud.
Si estos músculos pierden una cantidad de masa significativa, las actividades funcionales asociadas con la fuerza y resistencia se ven afectadas, lo que lleva a una pérdida gradual de la capacidad y en algunos casos de la independencia. Consultar a un fisioterapeuta puede ayudar a prevenir todos estos problemas, ya que pueden evaluar la salud de sus articulaciones, que es un factor importante en el mantenimiento de la fuerza muscular. Se evaluará también la fuerza muscular en general y se definirán las posibles debilidades que se pueda tener.
El fisioterapeuta le dará asesoramiento funcional para mantener su fuerza muscular, como utilizar las escaleras en vez de los ascensores siempre que pueda, caminar una o dos veces por semana para mantener la fuerza, la coordinación, el equilibrio y el sentido de la posición. Si es necesario, serán diseñados ejercicios específicos para su problema individual, centrado en usar el músculo en situaciones funcionales.
La disminución de la masa muscular y la fuerza, se puede detener y, en algunos casos se puede invertir, ya que no hay impedimento para aumentar la fuerza muscular en las personas mayores. Su fisioterapeuta le puede asesorar sobre los movimientos articulares correctos y los ejercicios de fortalecimiento para llevarlo a cabo.
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