Con la llegada del otoño apetece ponerse a hacer cosas nuevas. Después del parón del verano y con la vuelta de temperaturas que hacen que quedarse en la calle hasta tarde sea más complicado, empezar aquello que siempre nos apeteció hacer parece una buena idea ahora en otoño. Nuevos cursos, rutinas nuevas, apuntarnos de nuevo al gimnasio y volver a ponernos en forma…
Asociándolo al nuevo curso escolar, podemos empezar una formación en aquello que siempre quisimos hacer y no pudimos en su momento, o que no teníamos tan accesible cuando éramos más jóvenes, o simplemente que ahora la curiosidad nos lleva por otras vías que nunca pensamos que explotaríamos. ¿Qué puedes perder?
Uno de los cursos que más auge tiene en los últimos tiempos es el de Auxiliar de Fisioterapia que, buscando opiniones sobre formación y empleo entre las tendencias más solicitadas actualmente, ha sido el destacado en las búsquedas.
Debido al ritmo de vida vertiginoso que llevamos actualmente, nuestro cuerpo se resiente con lesiones de más o menos importancia por cuestiones tan dispares como malas posturas, ejercicios deportivos realizados sin supervisión, movimientos bruscos, mala alimentación…
¿Qué hace un auxiliar de fisioterapia?
Un profesional de la fisioterapia debe conocer muy bien la anatomía humana para saber diferenciar e identificar las diferentes patologías que le afectan, tanto a nivel muscular y óseo como debido a afecciones respiratorias, digestivas o cardivasculares.
El papel del auxiliar en una clínica de fisioterapia es muy importante para realizar funciones de apoyo al licenciado fisioterapeuta, a la hora de aplicar técnicas que requieran de colaboración y cuidado del paciente, así como gestión y planificación del calendario y las tareas por citas con los usuarios, seguimiento y evolución de tratamientos de larga duración y todo tipo de tareas que harán que tu formación haya merecido la pena.
Puedes empezar de auxiliar con uno de estos cursos y posteriormente ir evolucionando hacia una formación más experta o decidirte a ir a la universidad a hacer la formación oficial. Te permitirá entrar en contacto con el sector y con las nuevas tendencias, como las vendas kinesológicas, los tratamientos con calor y frío o el tradicional uso de la fisioterapia mediante masajes por presión.
Lo bueno de este tipo de cursos es que harás prácticas al terminar y conocerás de primera mano y de forma directa como se trabaja en un clínica de fisioterapia. Podrás sentirte importante desde el primer día aplicando los conocimientos que hayas aprendido en las clases teóricas y recibiendo en todo momento la supervisión de un profesional cualificado que, a lo mejor, queda gratamente impresionado por tus conocimientos o tu forma de tratar a la gente y te ofrece trabajar de forma continua.
Si siempre has estado interesado en el deporte, en las aplicaciones de la fisioterapia al rendimiento deportivo y de la vida cotidiana, o simplemente te interesa mejorar tus conocimientos sobre el cuerpo humano y el movimiento y abrirte camino hacia nuevas oportunidades laborales no tienes más que decidirte y empezar una nueva vida, quien sabe, quizá la nueva oportunidad que llevas buscando durante mucho tiempo está a la vuelta de la esquina.