Si ya tienes un bebé en casa, seguro que habrás comprobado que el bebé cuenta con unos periodos de sueño – sobre todo los 
tres primeros meses – muy cortos, pero paradójicamente, ellos suelen dormir unas 16 horas al día. Esto quiere decir que aunque la mitad del día los bebés están durmiendo, no lo hacen del tirón, sino que se van despertando al menos cada dos horas.
Se sabe que hasta que un bebé tiene 4 meses, no empieza a dormir noches enteras sin despertarse, por eso es aconsejable que comiences lo antes posible a crear hábitos de sueño en tu bebé.
El primer paso es que tu bebé aprenda cual es la diferencia entre el día y la noche y cuál es el momento para estar despierto y cuál es el mejor momento para dormir.
Los bebés o pueden distinguir cuando es de día y cuando es de noche hasta que cumplan dos semanas.
A las dos semanas, debes comenzar a enseñarle que mientras haya luz y ruidos debe estar despierto. Abre todas las ventanas para que le dé la luz y deja que los ruidos de la casa estén presentes durante el día: lavavajillas, televisión, etc.
Si le das de comer y quiere quedarse dormido despiértalo dulcemente o comienza a jugar con él.
Por la noche debe ser todo lo contrario. Los ruidos deben estar minimizados y si se despierta no juegues con él. Si se queda dormido mientras lo alimentas déjalo que y todas las luces deben estar apagadas.
Las rutinas
Aunque el bebé sea pequeño, tú puedes crearle una rutina para que aprenda cuando es hora de ir a la cama. Por medio de la rutina, irás preparando al bebé para que entienda que esos actos van con esa hora de dormir, por ejemplo, ponerse el pijama mientras le cantas una canción de bebé puede ser una buena rutina.
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