El desempleo de larga duración puede traer consigo otros problemas derivados a nivel físico. ¿Cómo ganar bienestar físico cuando estás en el paro?
Consejos de salud para desempleados
1. Evita por encima de todo los horarios desordenados. Es muy habitual estar hasta tarde viendo la televisión y no madrugar al día siguiente.
2. Súmate al lema «vida sana, en cuerpo sano». Por tanto, sal a caminar 30 minutos todos los días, puedes hacer ejercicios de relajación para canalizar el estrés del paro, haz todos los trayectos andando… También puedes ir al gimnasio para hacer ejercicio físico.
3. El aislamiento social es uno de los grandes problemas de una persona que está en desempleo desde hace mucho tiempo. El sedentarismo crece como consecuencia de la falta de relaciones sociales. La persona pasa más tiempo en casa. Para evitar caer en este error, potencia tu vida social utilizando al máximo los recursos de oferta cultural gratis que hay en tu ciudad: conferencias, charlas, tertulias, cursos…
4. Potencia el ocio en casa por ser más económico. Pero es importante estar en contacto con otras personas, ver otras caras para tener un buen nivel de bienestar físico y mental.
5. Cuida mucho tu alimentación. Los problemas profesionales pueden producir dos efectos: roban el apetito o, por el contrario, como consecuencia de la ansiedad, la persona come sin control. Al hacer la cesta de la compra evita los productos de placer y apuesta por los productos que son un básico en tu despensa.
6. El desempleo también trae consigo un profundo cansancio mental. El descanso correcto es vital. Duerme ocho horas diarias en un colchón de calidad. Las preocupaciones roban el sueño a muchas personas. Si estás dando vueltas y vueltas en la cama sin poder conciliar el sueño, entonces, levántate a tomar una infusión o un vaso de leche caliente.
Mantener el equilibrio físico y mental
Mantener el equilibrio físico y mental en el desempleo es difícil. La persona que está sin trabajo renuncia a muchas cosas de su vida anterior porque ha cambiado su nuevo orden de prioridades en la vida. Existen placeres que son una necesidad vital para tu salud como un baño de agua caliente o un buen masaje. El placer ayuda a canalizar toda la energía negativa que causa la preocupación.