Existen muchos momentos de la vida en los que podemos tener la sensación de estar tensos y rígidos como consecuencia de los nervios internos que genera una situación externa.
Este tipo de situaciones pueden darse, especialmente, en el plano laboral donde la ansiedad es un problema en la oficina.
¿Cómo relajarte físicamente?
Cinco consejos para relajarte
1. Busca un lugar en donde puedas aislarte un poco de los demás. Si te resulta imposible buscar ese espacio, entonces, cierra los ojos durante unos minutos para desconectar de todo el entorno y centrarte en ti.
2. Tómate un descanso de cinco minutos. Deja todo aquello que estés haciendo porque es mucho mejor que cuides de ti y te recuperes antes de centrarte en algo externo a ti.
3. Si tienes una cafetería cerca, acude para tomarte una infusión. Te ayudará a darte tranquilidad.
4. Respira profundamente, siente que cada soplo de aire que tomas renueva tus pulmones y te limpia por dentro.
5. Recuerda en tu mente el momento más feliz que has tenido en tu vida. Céntrate en disfrutar de ese momento y visualiza cada detalle porque los momentos felices que has tenido son un tesoro emocional que te ayudan a combatir esa tensión tan humana que producen momentos difíciles.
Cuando te relajas mentalmente, te relajas físicamente
Cuando te relajas mentalmente también te relajas físicamente gracias a la conexión tan íntima que existe entre cuerpo y mente. Estos sencillos consejos prácticos pueden servirte para relajarte antes de hacer una entrevista de trabajo, antes de acudir a una primera cita, antes de hacer un examen importante o en cualquier reto que te suponga un esfuerzo extra.
La relajación es una fuente de salud porque estás en paz contigo mismo cuando logras desconectar de todo para centrarte en ti mismo al darte un poco de amor. A través de la relajación te das autoestima y afecto a ti mismo.
