Las picaduras de los insectos también provocan alergias, y es que el veneno que inyectan las avispas y abejas es tóxico, por lo que en muchas personas causan reacciones alérgicas, por lo que si se produjera una picadura, hay que elevar el miembro afectado y hay que aplicarle una comprensa para deducir la inflamación, así como se deberá limpiar con agua fría y jabón, pero sin reventar las ampollas, a continuación se le debe aplicar una crema para evitar la inflamación y si sigue inflamado lo mejor es consultar a un especialista.
Lo mejor en estos casos es evitar entrar en contacto con paneles de abejas, o nidos de avispas, y en verano hay que tener cuidado si se está en un lugar al aire libre, y por último no llevar ropas con colores llamativos, ya que eso atrae tanto a abejas como avispas, siguiendo estos consejos estaremos alejados de las picaduras.




