Un nuevo estudio sugiere que una dieta rica en antioxidantes para personas mayores no solo detiene el proceso de envejecimiento, sino que además mejorar su sistema inmunológico.
Los antioxidantes se dicen que ralentizan el proceso de envejecimiento, pero esto no se ha comprobado definitivamente todavía, sin embargo esto ha tomado un nuevo giro. El hecho de que el envejecimiento afecta negativamente al sistema inmunológico no es uno nuevo, pero con un mayor conocimiento, parece que este fenómeno podría ser evitado.
Todas las células liberan radicales libres en nuestro cuerpo, lo que es una parte normal del proceso de metabolismo de nuestro cuerpo, estos, después de un tiempo, puede causar estrés oxidativo en las células de nuestro cuerpo, y es el responsable del proceso de envejecimiento.
En modelos de ratones, la presencia de cantidades crecientes de antioxidantes condujo a una inversión de la disminución de la fuerza de las defensas de sus cuerpos. En los ratones que se le aplicaron potentes antioxidantes, se mantuvieron más sanos durante más tiempo, y el estrés oxidativo que se produce naturalmente fue eliminado.
El estrés oxidativo provoca daño a las células de nuestro cuerpo y puede resultar en el desarrollo de muchas enfermedades, en los ratones estudiados, el objetivo era encontrar si el estrés oxidativo rompían las células dendríticas. Estas células actúan como centinelas a los sistemas de defensa de los cuerpos. Cuando se ven afectados, el sistema inmunológico no puede responder tan eficientemente.
Por supuesto que hay grandes sugerencias para extraer de este estudio en lo que respecta a ayudar a los seres humanos. Este estudio implica que en los ancianos el sistema inmunológico humano puede ser fortalecido a través de una serie de inyecciones de antioxidantes.
Al reducir la probabilidad de contraer enfermedades, es muy probable que las personas mayores sean capaces de vivir vidas más saludables y más largas.
Los sistemas inmunológicos debilitados dejan a los ancianos en un mayor riesgo de desarrollar enfermedades, y enfermedades con efectos potencialmente mortales. Por ejemplo, alguien con un sistema inmunológico débil tiene un mayor riesgo de contraer cáncer. Al ayudar a evitar más este tipo de enfermedades, un régimen de antioxidantes puede ser un gran paso adelante en la lucha contra el proceso de envejecimiento y los perjuicios que le acompañan.
Nuestro sistema inmunológico nos protege de enfermedades, infecciones y enfermedades. Cuanto más fuerte sea nuestro sistema inmunológico, mayor será nuestra probabilidad de vivir una vida feliz y saludable.
Mantener la salud es muy importante ya que a medida que envejecemos nuestro sistema inmunológico comienzan a debilitarse de manera natural. Tal vez los hallazgos de este estudio podrán ayudar a tomar medidas para corregir este problema y permitir que nuestra población de adultos mayores vivan sin la preocupación de enfermar.