Un parche autoadhesivo que contiene la suficiente insulina para pasar a través de la piel podría hacer desaparecer la necesidad de inyecciones diarias para muchos diabéticos. El parche electrónico de alta tecnología contiene la insulina suficiente para que dure varios días en los pacientes.
Cuando un dispositivo portátil, llamado aplicador de sonido, se pone sobre el parche, este dispara ondas de sonido que se abren los poros de la piel y fuerza a la droga a introducirse en el torrente sanguíneo más rápidamente.
Las pruebas iniciales sugieren que el parche, llamado U-Strip, puede administrar insulina en la sangre tan rápida y efectivamente como una aguja. Este parche ha sido objeto de pruebas iniciales en los EE.UU. que involucraron alrededor de 100 personas que eran diabéticos insulino-dependientes.
Los resultados demostraron la eficiencia del parche, sin embargo, un ensayo más grande, con más de 500 pacientes, se está realizando en estos momentos, si tiene éxito, el revolucionario dispositivo podría estar disponible en los próximos tres años.
La diabetes afecta a millones de personas en todo el mundo, este sería un revolucionario invento para todas aquellas personas que deben inyectarse diariamente. La insulina ayuda a los músculos absorber el azúcar de la sangre para quemar como una fuente de combustible.
Sin los niveles adecuados de insulina, la enfermedad puede causar daños irreversibles a los riñones, ojos, nervios, corazón y arterias principales.
Muchos pacientes deben probar sus niveles de azúcar en la sangre varias veces al día, y la necesidad de pinchazos de insulina por el resto de sus vidas con el fin de mantener niveles adecuados de la hormona.
Los expertos creen que muchos podrían tener un mejor control de la glucosa si había una manera más fácil de tomar su insulina.
La diabetes se produce cuando el páncreas deja de producir insulina por completo, o su producción cae en forma abrupta. El parche de onda de sonido puede ser una alternativa indolora y mucho más discreta para aquellas personas que esconden su enfermedad ante los demás.
La liberación de las drogas por parches en la piel es ya ampliamente utilizada en la terapia de reemplazo hormonal para la menopausia y para ayudar a los fumadores a dejar de fumar.
Sin embargo, esta tecnología sólo funciona con los medicamentos compuestos de moléculas pequeñas, por ello las moléculas más grandes, como las que se encuentran en la insulina, a través de la piel ha sido un gran obstáculo durante muchos años.
El paciente generalmente se usa el parche en su brazo y coloca el aplicador de sonido portátil – aproximadamente del tamaño de un teléfono móvil – directamente sobre él. Al presionar el botón, se produce una ráfaga de ondas de sonido que impulsan la insulina a través de los poros de la piel y en el torrente sanguíneo en cuestión de segundos.
El dispositivo puede contener diferentes cantidades de insulina, lo que le permite adaptarse a cada paciente, y contiene un chip de computadora para que los médicos pueden programar con exactitud la cantidad de insulina tiene que ser descargado en el cuerpo.
Al igual que con las inyecciones de insulina, esto tiene que hacerse varias veces al día para mantener los niveles de glucosa en sangre bajo control. Sin embargo, el parche es resistente al agua y se queda en la piel 24 horas al día, incluso durante la ducha o bañera.