Cuando las células cerebrales crecen de manera descontrolada se forma una masa en el interior del cerebro. Si el crecimiento se da de forma paulatina y se puede curar estamos frente a un tumor benigno, si de lo contrario el crecimiento se da rápidamente y tras la intervención quirúrgica se vuelve a reproducir a gran velocidad estamos frente a un tumor maligno.
Los síntomas son provocados por la hinchazón y la presión que genera la masa del tumor sobre la zona del cerebro que se encuentra saludable y está a su alrededor. A los pacientes se les puede suministrar corticoide para aplacar las molestias pero la mejoría solo es por un momento.
Para diagnosticar el tumor cerebral es necesario realizar una tomografía computarizada o una resonancia magnética, así se sabrá con precisión la ubicación y el tamaño del mismo.
En la intervención quirúrgica lo que se hace es quitar el tumor, anteriormente lo que se hace es tomar una muestra del tumor para saber si se trata de un tumor maligno o benigno. Lo complejo de la cirugía va a depender de cómo sea el tumor y donde esta situado, pero lo mínimo que duran son cuatro horas.
Si se interviene un tumor benigno lo que se logra es la curación del mismo, y se interviene un tumor maligno lo que se busca es diagnosticar con exactitud que tipo de tumor es achicarlo para minimizar las molestias, y también proporcionar los tratamientos adecuados que harán más efectos si el tumor es mas pequeño y las más habituales son la quimioterapia y la radioterapia.
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EN SI NO DICEN CUAL ES EL TRATAMIENTO QUE DEBE APLICAR EL FISIOTERAPEUTA