La lavanda nos podrá aportar grandes beneficios relajantes, hablaremos de esta interesante propiedad en la siguiente entrada. El aroma de la lavanda, la viscosidad hace que las plantas sean una de las preferidas para la decoración de los jardines. Además se han empleado desde hace cientos de años para la preparación de remedios naturales por tener propiedades relajantes o por ser una buena opción para la cosmética.
Propiedades de la lavanda
La lavanda es una planta medicinal que se emplea en diferentes dolencias, es ideal para tratar el insomnio o controla el estrés por tener un aroma agradable y generar calma.
Para combatir el insomnio se puede poner un saquito de lavanda debajo de las sábanas. También es una buena opción cuando se quiera evitar el mareo de un viaje o una digestión a causa de un estado nervioso superior. Se podrá tomar una infusión de lavanda sola o combinada con otras plantas como el tilo, la melisa o la amapola.
Es una excelente opción para calmarlos dolores, con aplicación externa y también preparar distintos productos con aceite esencial de lavanda que se extrae de la destilación de las flores. Dentro de las dolencias en las que se puede emplear son: tortícolis, dolores de cabeza, dolores lumbares, migrañas, dolores de pies y molestias reumáticas.
Remedios relajantes con lavanda
Dentro de todas las plantas que se emplean para la medicina natural la lavanda está catalogada como una de las más versátiles, aunque muchas personas la consideran atractiva por su color y por su aroma.
Para conseguir una relajación muscular podemos usarla sola o potenciar sus beneficios usándola junto con la manzanilla. Se necesitarán 30 gramos de flores de manzanilla, tres cucharas de gel de aloe vera, 30 gramos de lavanda y tres tazas de agua. Para la preparación colocaremos las flores de manzanilla y de lavanda en una olla de agua. Se la deja hervir y se agrega el gel de aloe vera, dejar cocinar por unos tres minutos. Retiramos del fuego y colamos el resultado. Con el resultante se prepara un baño tibio y se sumerge el cuerpo por unos 20 minutos.
Ayuda en los dolores de cabeza
Cuando nos duele la cabeza la lavanda podrá ayudarnos para reducir el malestar, lo mismo que en un cuadro de exceso de estrés o en un agotamiento nervioso. Tiene un efecto sedante y propiedades antiinflamatorias que ayudarán a reducir la tensión.
Se necesitará una taza de agua y 5 gramos de flores de lavanda. Se agregan las flores de lavanda a la taza de agua hirviendo. Se deja reposar por unos 10 minutos y se filtra. Tomar de a sorbos, siempre teniendo en cuenta que podría generar somnolencia, por lo que se aconseja tomar la infusión antes de irse a dormir o en un momento en que se pueda descansar.
También se podrá emplear para reducir el estrés que puede aparecer por las situaciones cotidianas. Una de las formas más conocida de emplearlas es mediante la aromaterapia. Los componentes que conforman el aceite esencial regula las funciones del sistema nervioso provocando un efecto calmante en el organismo. Se necesitarán 10 gotas de aceite en medio litro de agua. Se agregan las gotas al agua hirviendo y usamos los vapores para realizar la sesión de aromaterapia. También se podrá usar en hornillos o difusores.
Con todas las opciones que te dios podrás usar la lavanda y aprovechar sus beneficios a favor de los distintos formatos. Te dejamos un último consejo, agrega algunas gotitas durante el lavado de la ropa para impregnarle su perfume, especialmente en la ropa de cama.