Ser una persona saludable no es algo imposible de lograr, tan sólo es cuestión de darse cuenta de que estás apegado a ciertos hábitos negativos que no son de mucha ayuda para tu organismo. Sin embargo, no se trata simplemente de admitirlo, también hay que cambiarlo, y comenzar a adoptar nuevos hábitos que sean beneficiosos para ti.
¿Es posible un peso saludable sin tener encima la presión de alcanzar el peso ideal según los estándares?, ¿Es posible tener una piel sana y además que todos nuestros órganos funcionen correctamente? Por supuesto.
Existen algunos factores que pueden beneficiar a tu cuerpo y es por ello que a continuación hemos enumerado algunos secretos para ser una persona saludable.
Buena alimentación
Tras más de un siglo de dietas especiales de acuerdo a cada tipo de persona, presenciamos una alarmante cifra de sobrepeso y obesidad, y con ellos una serie de enfermedades como diabetes tipo 2, problemas cardiovasculares y otras afecciones.
El problema es que habitualmente vemos dietas muy bajas en calorías y proteínas, poco agradables y obviamente nada sostenibles en el tiempo, de manera que una persona con problemas de sobrepeso, se verá tentada rápidamente a dejar cualquiera de estas dietas. De manera que es importante contar con nuevas ideas frente a los viejos errores que ya fracasaron.
Una de las funciones más importantes y notorias de los alimentos es brindar placer y gracias a la cultura de las dietas, la comida se ha convertido en un enemigo; tanto que muchas personas sufren de trastornos alimenticios como anorexia y bulimia.
Hay una pregunta obligatoria que debes hacerte para poder continuar tu dieta: ¿Qué alimento no podría faltar en tu menú si no quisieras bajar peso o si no fueras diabético o tuvieras problemas cardíacos? A partir de la respuesta, toma la lista y sin ningún tipo de culpa, sigue consumiendo esos alimentos en proporciones pequeñas.
Otro secreto en cuanto a la alimentación es balancear la dieta. Recuerda las clases de la escuela, cuando se hablaba de los tipos de alimentos: proteínas, carbohidratos, grasas, fibras, vitaminas y minerales, los cuales son sumamente necesarios para ser una persona saludable. Incluso, está comprobado científicamente que se requieren 20 tipos de alimentos diferentes por semana para no sufrir carencia de nutrientes.
Actividad física
El deporte y la actividad física son necesarios para el mantenimiento correcto del organismo, no sólo para tener una figura esbelta. Por esta razón es importante motivar a los niños a hacer deporte, desde un punto de vista no competitivo, para que desarrollen su motricidad y además para que cuando crezcan se sientan inclinados a ser personas más activas que sedentarias.
Para los adultos, el deporte viene siendo una especie de inversión a futuro, una preparación previa para llevar la vejez de forma más placentera. Y es muy recomendable practicar actividades variadas como caminar, bailar, nadar, jugar al tenis, o practicar yoga.
Salud mental
El equilibrio entre la mente y el cuerpo es sumamente importante, porque nada hacemos con un cuerpo sano, si estamos hasta la cabeza de conflictos internos, que de forma prolongada se convertirán en un problema físico debido al estrés.
Las personas tienden a ocultar sus pensamientos y emociones, y eso impacta directamente en la salud física, de manera que lo mejor es expresar los sentimientos y dejarlos fluir. No importa si sientes ganas de llorar estando en un lugar público, es peor reprimirse que soltarse, de todas maneras, lo peor que puede pasar es que alguien intente consolarte.
Manejar el estrés tampoco es fácil pero el salir a caminar diariamente a un lugar agradable o poner música y bailar en casa puede ayudarte a liberar las cargas y tensiones.




