Actualmente, la depresión es uno de los padecimientos que mina lentamente la salud de millones de personas en todo el mundo sin restricción de género ó edad, hasta antes del año 2000 las investigaciones en torno a esta enfermedad señalaban como principales afectadas a las personas adultas del sexo femenino, en los últimos años los trastornos depresivos se manifiestan de forma similar en ambos géneros.
Lamentablemente, los datos estadísticos también señalan que la depresión afecta a los niños y adolescentes en proporciones importantes y los lleva al suicidio, cuando no son atendidas sus llamadas de auxilio que son evidentes.
La depresión no se caracteriza como un sentimiento de tristeza o melancolía, es un trastorno que obstaculiza el desempeño normal de las actividades cotidianas produciendo malestar en la persona que manifiesta el padecimiento y los familiares que la rodean cuando se percatan de que algo no está funcionando bien. El trastorno depresivo se está convirtiendo en una enfermedad prácticamente común que puede adquirir tintes graves cuando no recibe tratamiento médico oportuno.
Clasificación de los trastornos depresivos
Al principio el trastorno depresivo puede tratarse únicamente con terapia psicológica, no obstante, la falta de atención médica agrava la depresión impidiendo el desarrollo de las labores más elementales en estas circunstancias, el tratamiento puede requerir medicamentos psiquiátricos y la psicoterapia, en los casos extremos la depresión lleva al suicidio y es necesaria la hospitalización.
La información para concienciar a las personas acerca de lo importante que es tener conocimientos relacionados con los trastornos depresivos, que se presentan en adultos, adolescentes y niños empieza por designar los tipos de depresión que se conocen comúnmente.
Tipos de depresión:
- Trastorno depresivo grave o mayor: se presenta una combinación de síntomas que impiden trabajar, dormir, estudiar, comer, anhedonia o falta de placer para disfrutar cualquier actividad, hay falta de concentración, insensibilidad/exceso de sensibilidad, llanto continuo, tristeza, melancolía, memoria fallida, baja autoestima y dormir en exceso/no dormir, principalmente.
- Trastorno distímico ó distimia: los síntomas se presentan durante largos periodos (superior a dos años), aunque en forma atenuada sin incapacitar a las personas, sin embargo, pueden manifestarse épocas de mayor intensidad que generalmente no se asocian con un trastorno depresivo hasta que evoluciona a un trastorno depresivo grave o mayor.
- Depresión psicótica: se asocia con una depresión grave acompañada de alguna forma de psicosis que implica pérdida de noción con la realidad, alucinaciones y delirios.
- Depresión posparto: este trastorno se vincula con las mujeres que tienen poco tiempo de haber pasado el trabajo de parto y requieren apoyo emocional para enfrentarse así mismas en la etapa de la maternidad.
- Trastorno afectivo emocional: es la depresión asociada a los meses de invierno cuando se reducen las horas de luz solar.