Aún es poco lo que conocemos sobre los enormes beneficios que puede tener el trabajar con animales tales como los delfines en la recuperación de enfermedades. Estas asombrosas criaturas son nobles por naturaleza y parece haber un vínculo hasta ahora inexplicable entre estos cetáceos y los seres humanos. Son pacíficos y con el entrenamiento adecuado, son formidables para hacer facilitar un poco una experiencia difícil, como puede ser una larga recuperación tras una lesión.
Este tipo de terapias son sumamente beneficiosas, sobre todo por la naturaleza afable y divertida de estas criaturas, que ayudan a que las personas que toman una fisioterapia de recuperación se diviertan y tengan una mejor actitud hacia realizar las actividades. Además, al ser criaturas marinas, las actividades fisioterapéuticas deben ser realizadas en el mar. El mar, o agua salada en su defecto, es otra increíble herramienta para la recuperación física y mental de una persona, ya que de por sí el hecho de flotar sobre el agua es bastante relajante.
Este tipo de terapias se conocen como Talasoterapia, que es un tratamiento fisioterapéutico que involucra el mar en toda su extensión, ya sea el agua marina o bien el clima, así como algún otro elemento de este formidable ecosistema. La delfinoterapia es relativamente nueva, pero ya ha demostrado tener un impacto impresionante en la recuperación de las personas, sobre todo por que existe un cambio notable en la actitud de las personas que se benefician de las terapias físicas con delfines. La actitud, las ganas, así como contar con un especialista, son los tres aspectos principales para que un tratamiento fisioterapéutico sea verdaderamente efectivo. De esta forma, gracias a que los delfines son graciosos y que además estas criaturas se esmeran en convivir con las personas, los pacientes estarán ansiosos por su siguiente sesión, lo que en consecuencia provoca una recuperación mucho más pronta y favorable.




