La pereza es un sentimiento muy humano, sin embargo, cuando nos dejamos tentar por la pereza nos sentimos peor con nosotros mismos. En el mes de enero se produce un incremento importante en el número de inscripciones al gimnasio.
Sin embargo, hacer una matrícula en el gimnasio no es sinónimo de ir con frecuencia ya que muchas personas tienen una voluntad débil. En Fisiostar, desde la perspectiva de la fisioterapia del deporte, te damos las claves para convertir en hábito la rutina de ir al gimnasio.
Expectativas realistas
En primer lugar, algunas personas se frustran muy pronto al ir al gimnasio y no ver resultados de adelgazamiento evidentes a corto plazo. Por ello, es fundamental tener metas realistas y entender que los beneficios de ir al gimnasio no sólo son físicos sino también emocionales, es decir, también te sientes mejor contigo mismo, al salir de casa, ver a otras personas y cumplir con tu rutina.
Cómo elegir un buen gimnasio
Para elegir un buen gimnasio es positivo que busques tu propia comodidad y optes por un centro que esté situado cerca de tu casa. De esta forma, si surge cualquier imprevisto te será mucho más fácil atender una urgencia. Si eliges un gimnasio que esté cerca de tu casa pierdes poco tiempo en desplazamientos y no dejarás de ir en los días de lluvia. Otra alternativa práctica es buscar un gimnasio que esté cerca del lugar de trabajo.
Céntrate en todo lo positivo
Piensa en todo lo positivo que tiene para ti hacer ejercicio físico y céntrate en el lado bueno de la balanza. Cambia tu atención hacia lo positivo cuando a tu mente venga una idea negativa. Ten en cuenta los beneficios de una cinta de correr.
Queda con un amigo
Hoy día, cada vez son más las personas que acuden al gimnasio, por ello, seguro que conoces a alguien en tu entorno más cercano que también lo hace. En ese caso, el compromiso de compartir una actividad en común es enriquecedora.
Con un entrenador personal, esa es la mejor solución, con él trabajas porque trabajas. jejeje… Eso de ir al gym es todo un reto pero vale la pena cuando ves los resultados.