Sin importar el tipo de deporte que practiquemos, la inclusión de rutinas de entrenamiento es fundamental para fortalecer nuestro organismo y nuestro rendimiento general. No importa si estamos hablando de incorporar rutinas de fortalecimiento muscular o ampliación de nuestra fuerza o capacidad pulmonar. Entrenar implica incorporar determinadas rutinas y conductas, para que nuestro cuerpo se vaya fortaleciendo según el objetivo que tengamos en cada disciplina.
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Rutinas y material para entrenar
Dependiendo el deporte y la intensidad de nuestra práctica, hay numerosas alternativas para seleccionar correctamente el material y las rutinas de entrenamiento. Por ejemplo, el running que es una de las disciplinas de mayor crecimiento y popularidad en los últimos años, requiere gran capacidad pulmonar y resistencia. Por ese motivo, nuestras rutinas de entrenamiento y fortalecimiento deben girar en torno a lo aeróbico, a la potencia de nuestras piernas y al rendimiento general de nuestra capacidad pulmonar.
No se trata de empezar un día a correr y nada más. Es importante ir acostumbrando a nuestro cuerpo a la disciplina deportiva, de lo contrario nos frustraremos a los pocos días porque veremos que no podemos seguir el ritmo que nos impusimos. Todo comienzo debe ser paulatino e ir incorporando poco a poco mayores desafíos. Consultando a expertos en la materia, nos explican que los primeros resultados de un entrenamiento en running, empiezan a percibirse recién a la cuarta o quinta semana de haber realizado una rutina de carrera y respiración adecuada.
Plan de entrenamiento para iniciarse en el running
Pensando en la mejor forma de empezar a correr, el diseño de nuestra rutina de entrenamiento debería incorporar mayor cantidad de salidas semanales, pero de corta duración. De esta forma, nuestro organismo se va adaptando poco a poco a las exigencias y necesidades de la disciplina. Además, es importante prestar atención a diferentes señales que nos da nuestro cuerpo.
Si en algún momento empezamos a sentir dolor, hay que detenernos. Puede que estemos utilizando mal alguna técnica de carrera, o que nos hayamos lesionado. El running es muy beneficioso a nuestro estado de salud general, pero también puede haber instancias en las que su práctica debe ser momentáneamente suspendida. Ni bien comenzamos un nuevo deporte es normal que aparezcan molestias. Presta atención a la intensidad de las mismas para evitar empeorar situaciones de lesión.
Incorpora indumentaria
Otro elemento clave de la correcta práctica deportiva es la calidad de la indumentaria. El calzado debe estar diseñado para ese deporte, ya que de lo contrario lastimaremos nuestros pies pisarán incorrectamente y terminaremos afectando nuestras piernas y el rendimiento general de la carrera. Por eso, en la práctica deportiva y en una buena rutina de entrenamiento, no debemos descuidar la calidad de los elementos que utilizamos.