Durante la preparación al parto se suele enseñar a las embarazas, como deben respirar y lo beneficioso que es esto a la hora de parto.
La mayoría de estas respiraciones, hay que practicarlas en casa. Cuando ya estamos en el parte, deberás recordar las respiraciones que corresponden a cada momento, por eso es aconsejable que se tengan bien dominadas y eso sólo se consigue a base de práctica.
Etapas del embarazo y respiración
- Durante la etapa de la dilatación, la embarazada debe llevar cabo la respiración mediante jadeos.
- Durante la etapa de las contracciones fuertes, entra en juego la respiración abdominal.
- Durante la expulsión de feto, entra en juego la respiración toráxica.
Tipos de respiración
Respiración jadeante: Es una respiración rápida y entrecortada en la cual el tórax debe subir y bajar de forma repetida. Esta respiración consigue que el fondo del útero y el diafragma no estén en contando en ningún momento. También es perfecta para que a embarazada no tenga ganas de pujar antes de tiempo.
Respiración abdominal: Para esta respiración hay que tomar aire por la nariz y llenar los pulmones lo máximo que se pueda. Seguidamente, ir expulsando el aire por la boca para conseguir contraer los músculos del abdomen . Este tipo de respiración es la siguiente de la respiración jadeante, debe iniciarse cuando las contracciones empiezan a ser más fuertes.
Respiración toráxica: son respiraciones profundas y cortas. Antes de expulsar el aire se deben contraer los músculos de abdomen y relajar la pelvis. Esta respiración ya es la última parte y se lleva a cabo durante a expulsión del feto. Se puede hacer sentada o acostada. Durante la respiración se producen ganas de pujar.
Muchas mujeres se ponen bastante nerviosa el último mes y empiezan a practicar la respiración más de la cuenta. Esto no se debe hacer ya que hay una gran probabilidad de que se adelante el parto.




