La práctica del estiramiento muscular independientemente del tipo ejercicio que se realice ciclismo, tenis, gimnasia, atletismo, yoga y natación, entre otros; requieren de una de una sesión de estiramiento o elongación para flexibilizar, pero sobretodo para precalentar los músculos y evitar lesiones, la rutina de estiramiento debe de realizarse al principio y al final del ejercicio.
La finalidad primordial del ejercicio es conservar la salud, endurecer los músculos, favorecer el flujo adecuado del torrente sanguíneo, mantener el ritmo de la respiración y fortalecer el músculo cardiaco y hacerlo más eficiente o conservarlo en un nivel óptimo, incrementar la salud emocional y mental.
El estiramiento desde otro punto de vista, se ha aplicado a cada grupo de músculos y definido como el esfuerzo medio entre la práctica del ejercicio y el sedentarismo, de tal forma que las elongaciones evitan que el cuerpo se endurezca a nivel muscular o dé señales de rigidez por falta de ejercicio.
El estiramiento de los músculos antes de los ejercicios satisface los siguientes objetivos o metas:
1) Las funciones específicas son adecuar a los músculos para comenzar a ejercitarse previos al calentamiento y a una rutina de trabajo activo ya establecida.
2) Mantener los músculos activos de tal manera que estos se conservan más jóvenes y elásticos ante la rigidez que manifiestan los músculos carentes de actividad física.
3) Optimizar la flexibilidad de todo el cuerpo y con ello la movilidad.
4) Favorecer el riego sanguíneo en todo el cuerpo hasta el cerebro.
La ventaja fundamental del estiramiento es que evitan las lesiones de prácticamente todos los músculos cuando se practican las rutinas de ejercicio. Es importante considerar que durante el ejercicio los procesos bioquímicos que se desarrollan en los músculos generan reacciones metabólicas, cuyo producto final es el ácido láctico que produce dolor y rigidez efecto que se elimina con los estiramientos.