Existen diversas teorías en las ciencias sobre el movimiento humano, acerca de la biomecánica de esta gran maquina capaz de generar gran cantidad de movimiento que es el cuerpo, pero algo fundamental es la calidad del tipo de movimiento. Esto depende principalmente del control motor neuromuscular y de la movilidad y estabilidad de las articulaciones.
El concepto de “articulación x articulación” que proviene del ingles “joint by joint approach” (JbJ) popularizado por los fisioterapeutas Gray Cook y Mike Boyle, implica lo siguiente: el cuerpo se compone de “Segmentos móviles” y “segmentos estables” que se alternan durante el movimiento del cuerpo, partiendo de que los segmentos móviles puedan generar palanca de los segmentos estables para producir de manera eficaz la fuerza.
Importantísimo es también, conceptualizar la movilidad, la estabilidad y el movimiento. Cuando hablamos de movilidad es la distancia que se puede mover una articulación bajo el control de su propio cuerpo sin influencia o resistencia externa, por ejemplo las sentadillas. Allí podemos evidenciar la movilidad de la cadera, de la rodilla, del raquis lumbar e inclusive de la dorsiflexion del tobillo. La estabilidad por otro lado, se refiere a que tan bien un individuo pude controlar la movilidad que posee. Esta profundamente asociada al control motor, es la forma de “controlar los movimientos”. A veces suele suceder que se conocen casos de gente que posee lo que parecen ser casos de problemas de movilidad, que realmente son causados debido a que no se posee la estabilidad suficiente.
Los segmentos, fundamentales en el correcto movimiento.
Un segmento es un complejo de una articulación o articulaciones, como por ejemplo la rodilla. Esta tiene más de una articulación. Posee una entre la tibia y el fémur, otra entre la tibia y el peroné, y una tercera entre la rotula y el fémur. Entonces cuando nos referimos al conjunto de enfoque cataloga como segmento.
Entonces según este enfoque las articulaciones o segmentos van a necesitar ser estables o móviles para la ejecución armónica de movimientos en todo el cuerpo. El pie debe ser estable, el tobillo móvil. La rodilla tiene que ser estable, la cadera debe ser móvil. Si seguimos subiendo nos encontramos con la columna lumbar que debe ser estable, mientras que la columna torácica tiene que ser móvil. Así se van alternando los eslabones de esta cadena de articulaciones.
Cuando en el entrenamiento y ejercicio no se respetan estos conceptos, es cuando pueden empezar a aparecer las lesiones. Una muy común es gran movilidad sin estabilidad en la espalda baja, o los codos, que deben ser estables pero se ven obligados a ser móviles debido a la rigidez de los hombros.
La importancia es respetar el concepto de articulación por articulación y rehabilitar en base a el. Dejar de hacer ejercicios que no sigan estos conceptos para favorecer al correcto movimiento, es lo que nos va a evitar posibles dolores o lesiones a futuro.