Actualmente, la población en todo el mundo tiende a consumir alimentos ricos en carbohidratos debido a la facilidad de preparación al tratarse de bebidas enlatadas, conservas listas para calentar y servir, bollería, pan con rellenos dulces y salados, jugos concentrados y diversos refrescos con altos contenidos de azúcar, este es uno de los factores que incrementa las probabilidades de producir una enfermedad cardiaca y desencadenar un problema cardiovascular de consecuencias dramáticas.
En los últimos años, en varios países de América Latina y Estados Unidos han surgido asociaciones para la prevención de enfermedades del corazón, cuya función es advertir acerca del consumo de alimentos como los azúcares y las consecuencias cuya ingesta en exceso produce, señalando que hay una gran variedad de Problemas cardíacos vinculados con el consumo de azúcar en exceso.
Daños al corazón y síntomas médicos
Las principales alteraciones que sufre el sistema cardiovascular después de un tiempo de estar ingiriendo carbohidratos en exceso, se relaciona con la dislipidemia aterogénica cuya señal clínica es la presencia del colesterol malo (LDL) muy elevado con bajas concentraciones del colesterol bueno (HDL).
Otra de las enfermedades que cobra relevancia cada día, es la ateroesclerosis que se caracteriza porque se engrosan las paredes internas de las arterias con depósitos de grasa y metabolitos que con el paso del tiempo se acumulan, reduciendo el flujo sanguíneo e incrementándose el riesgo de padecer un infarto. Si bien, el consumo de carbohidratos, carnes rojas y otros alimentos producen alteraciones cardiovasculares, la falta de ejercicio también es un factor que se combina con los anteriores y lleva al daño del corazón.
El azúcar refinado es el carbohidrato más dañino que se consume en la actualidad y tiende a producir una gran adicción en las personas, la ingesta diaria debe de estar limitada a 25-37.5 gramos equivalentes a 100-150 kilocalorías.
